Campana de Largada - Turf Argentino

FELICES, SONRIENTES, CONFIADOS, LUJAN ASCOÑIGA, CRISTIAN MONTOYA, EMILIANO SINIANI Y GUSTAVO NICOLAS VILLALBA, SE PRESENTARON EN SOCIEDAD

Una hermosa sorpresa nos llevamos cuando lo vimos al Director de la Escuela de Jockeys de San Isidro, Héctor Libré con todos los chicos en la redonda de exhibición. Por supuesto que nos acercamos presurosos y gracias al Dr. Fernando Peña, se pudo tener la foto que figura en la tapa de la sección “Gente de Turf” de nuestra página. Iban a desfilar cuatro de los tantos chicos que hay en la Escuela, listos para saltar a la canchas y a la fama, según los acompañe la suerte, aunque lo más importante para triunfar, es trabajar, trabajar, ser respetuoso, no creérsela y ser educado, saber escuchar y saber aprender. Uno conoce tantos muchachitos que ganaron unas carreras y te miraban por arriba del hombro, como si fuesen Falero, Ricardo, o Domingos. Y uno que hace rato ve pasar profesionales, no era que lo estaba esperando, pero por los ejemplos vividos, no faltaba mucho para que se estampen en la pared del olvido. Y así pasaron una montaña de muchachos que tenían posibilidades, pero el autito, las chicas, las fiestas, las pioladas, le pasaron la factura en su momento y nunca más se recuperaron. Por suerte hay muy buenos ejemplos en nuestra actividad, por caso Luciano “Cejita” Cabrera, un gran pibe, que fue pasito a pasito, educado, muy buena persona, que abandonó los kilos y los profesionales lo siguen buscando. Es un buen ejemplo, un gran ejemplo para que los chicos nuevos se miren al espejo.

Rodeados por familiares y amigos, los cuatro saltaron a la cancha para hacer un canter, tres chicos y una chica, que muy pronto van a figurar en los programas oficiales de los hipódromos. Ella, Luján Ascoñiga, sonrisa de alto vuelo, hizo un paseo ligero, mostrándose, ellos, Cristian Montoya, Emiliano Siniani y el crédito de muchos, Gustavo Nicolás Villalba.

Toda la suerte del mundo, sigan los dictados que se les enseña, trabajo, humildad, educación, así van a llegar muy lejos.

Gente de Turf, qué Dios los bendiga en tan difícil profesión…