Campana de Largada - Turf Argentino

MARTES POR LA NOCHE, RODEADO DE AMIGOS, CENAMOS EN LA CASA DE JACINTO HERRERA, GRAN JOCKEY, MEJOR PERSONA, UN IDOLO DE LOS AFICIONADOS, DE LOS PROPIETARIOS Y DE NOSOTROS

Ya bien temprano el mismo Jacinto en persona, se encargó de recordarnos, uno por uno, que nos esperaba en su hogar, por la noche. No era fácil llegar a la casa, pero todos acordamos encontrarnos en el Banco que se erige en la Panamericana y Avda. Márquez.

Teníamos nuestro guía a disposición, ya que Matías Ríos se había criado por la zona y conocía el lugar, como la palma de su mano. Con Gustavo Duprat, grande, genio de la fotografía, el mejor, partimos desde el hipódromo de Palermo, en busca del cacique Gustavo González. Tras pasarnos de la Márquez (en estos días no embocamos en ninguno de los viajes, la salida correcta) volvimos y aterrizamos frente al banco. Les comenté a los muchachos que con la cara que teníamos era factible que a la brevedad, llegarían cuatro o cinco patrulleros.

La cuestión que apareció Matías y tras una charla con Pablo Carrizo, que venía en viaje con Héctor “Palanca” Torres y Nicolás Alcalde, como llevado por el padre al niño al colegio, fuimos por lugares remotos, casi intransitables, bordeando la Panamericana, hasta que se vislumbró el lugar elegido para vivir por Herrera y su familia.

Quiero decirles que no tomen esta enseñanza, salvo que vayan custodiados por el “Angel Face” Matías. El hombre no conoce el camino, conoce cada una de las piedras, del camino.

Fuimos recibidos por María y en segundos, aparecieron, Jacinto, estaban Sebastián y Santiago y al rato llegó Carolina. Presentados todos, tuvimos el gran gusto de conocer a Nelly, mujer de manos maravillosas y de hacer comidas exquisitas. Enseguida vino Anselmo Zacarías, detrás del jinete de La Quebrada Tony Bullrich y su señora esposa, la Gran Capitana, Florencia y de final, lo aguardamos pacientemente para comenzar a comer, llegó Jorge Ruiz Díaz.

Gustavo Duprat me prestó su máquina y pude escribir la tapa para la página, sobre el gran triunfo de South Marshy, del Stud Haras La Biznaga en el cotejo central de la jornada platense. Después, más tarde, seguiría con el comentario adentro.

Y verdaderamente pasamos una noche maravillosa. Casi fuimos atendidos a cuerpo de “Reyes”, no faltó nada, y si bien algunas cosillas estaban picantes, las aguantamos como señoritos que somos. Claro que en varias oportunidades miré fijamente un par de jarras de agua, para tomarlas, en el sentido correcto de la palabra y tirármelas por la cabeza. Era brava la parada.

Pensando en “La Página” les pedí que posaran para www.campanadelargada.com y el novio de la niña, Luciano, con mucha, pero mucha pinta, nos hizo el gran favor de sacarnos la foto de tapa.

Héctor Torres, Santiago (h), Anselmo Zacarías, Gustavo Duprat, Carolina (h), Jacinto Herrera, María, Florencia, Tony Bullrich, Gustavo González, y arriba la delantera, Nicolás Alcalde, Matías Ríos, Jorge Ruiz Díaz, Pablo Carrizo y quien escribe estas modestas líneas, Osvaldo Martínez. Ausente con aviso Rafael (h) en la facultad.

Lógicamente se habló de turf, de grandes caballos, de ganadores clásicos, de propietarios, y a medida que pasaba la noche, pila de anécdotas. Y entre tantas bromas y hermosos recuerdos, casi en el mismo momento que nos estaban contando 20 en cómodas cuotas, y todavía faltaba el postre, Jacinto lo miró seriamente a Tony y le dijo:

“estaría bueno hacer una carrera para jockeys retirados”.

No hace falta comentar que si a Jacinto le permitiesen correr, saldría de su casa con la chaquetilla de La Quebrada puesta y sin auto llegar en diez minutos a la alfombra dorada. Todo el grupo lo apoyó y comenzaron a soltar nombres y más nombres.

El Puma Sarati, Aníbal “Brazo Fuerte” Etchart, Pedrito Molina, Miguel Alejandro Díaz, El Galgo Libré, Julio Fajardo, Elvio Bortulé, Natalio Mezzotero. Y hay un montón más que ahora no recordamos, pero no estaría mal, dijo uno de los muchachos, mientras Tony respiraba firme, en vista que había pocos. Pero ya en casa escribiendo esta nota, me recordé de Carlos Domingo, Osvaldo Dávila, Vilmar Sanguinetti, Hugo Pérez, Pedro Pablo Sahagián, Omar Labanca, Gustavo Retorto, Eduardo Liceri, Agustín de Arriba, Héctor Santos, Pedro Armada, Jacinto Herrera, Carlos Giussi, Alfredo Gaitán Dassié, Hugo Capano, Clever Sanguinetti, Eduardo Tadei, Roberto Pellegatta, Francisco Arreguy, Juan Domingo Oural, Juan Gutiérrez, Juan Ublich, Carlos Verdasco, Jorge Valdivieso, Jorge Bretón y algunos más. Por consiguiente Sr. Presidente de la Comisión de Carreras del Hipódromo Argentino de Palermo, hasta podemos dividirla y si sigo haciendo memoria, podríamos confeccionar tres turnos. Tiene razón Jacinto con su iniciativa, acompañado como siempre en sus pensamientos por María, su esposa.

Inclusive salió el tema del querido y recordado Juan Maciel, al que Matías lo vio hace poco, estuvieron hablando y le dejó el teléfono de Misiones, donde está viviendo en estos momentos. Entre Tony y yo, pensamos en voz alta, qué lindo sería que “La Fiera” baje de sus nuevos pagos el 1 de mayo para hacerle un homenaje. Una enorme persona, llena de valores y de grandes gestos. Un tipazo. Que Dios quiera que Tony Bullrich pueda contactarlo para tenerlo, mimarlo, abrazarlos y aplaudirlo, por lo menos ese día.

Y vinieron los postres, el café, el té y ya no podíamos más. Duprat y Matías se miraban como si les hubiese pasado un camión doble acoplado por encima, Tony no dejó un plato sin probar, al igual que González, poquito, pero de todo. Zacarías y Ruiz Díaz, amigos de la casa, ya están domados de picantes y otras yerbas; Torres, Carrizo y Alcalde, hombres de Tribuna Paddock estaban por hacer el programa de mañana desde el sanatorio más cercano y quien escribe, un poquito pasado de sal, por momentos salía por la ventana, daba dos vueltas al country y aparecía otra vez, con la presión un poco más baja que de costumbre. ¡Un verdadero festín de comida y de turf!

Uno no se da cuenta, pero vaya si es necesario reunirnos. Hace bien al corazón, sin ninguna duda. Por eso, nuevamente te decimos muchas gracias Jacinto, por tu buena onda, por tu cariño hacia nosotros, por habernos permitido estar en tu hogar, junto a tu familia. Y por este momento maravilloso.

Abrazo sincero, amigo.